Empieza la cuenta a atrás. A solo cinco días del arranque del nuevo curso, un negrito/a que firma con el misterioso nombre de Amparo Impar, pero que no se llama Amparo y que tiene un buen par de razones para no hacerlo, nos regala la reseña de Vórtices, su primera y magna obra criminal.
Para saber más,
solo tenéis que continuar.
Vórtices, Amparo
Impar.
¿Cómo?
Bricolaje acústico, refrigeración
personalizada, vuelos sin motor, algún robo, entierros clandestinos,
despeñamientos motorizados, secretos milenarios y una docena de asesinatos.
Todo ello discretamente, sin ruido, sin
truculencias, sin armas que no reposen en cualquier hogar, y al parecer, en
Cuenca, ayer como quien dice, aunque la autora intente despistar al lector.
No lo conseguirá
con nosotros, desde luego. Porque incluso cita a varios reconocidos negritos de
las primeras hornadas.
¡Que Dios nos pille confesados!
Es evidente que no podemos fiarnos de ningún
vecino, ni pariente.
Convendría que
los novatos sepan donde se meten. Las Casas Ahorcadas no son un refugio. Absténganse
miedicas y pusilánimes.
3 comentarios:
Deseando estoy de leerla, como sé quien eres estoy segura de que no me va a defraudar
Esta, por muchas razones, y por ser tuya "Amparo Impar" ,acaba de pasar a ser la primera de las que no me puedo perder este año.
Me gusta como suena, si además es divertida, miel sobre hojuelas. Esperando para empezar a leerla.
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