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lunes, 14 de noviembre de 2011

Sin título, pero con sangre (III):

Lo sé, llego tarde. Pero con motivo, que he estado todo el fin de semana fuera y sin Internet, presentando a Álamo, Cerdán y Bueso en la convención de literatura fantástica, ciencia-ficción y terror española que se ha celebrado en Mislata este fin de semana.
Pese a lo dicho, mis más sinceras disculpas por la demora a su autora, Amparo Prados, la negrita más aplicada de las Ahorcadas (a la que ya ando buscando mote, ¿Petra Deliprados, quizá?) porque me lo envió a toda prisa, y siempre está dispuesta a echar una mano.
Aunque sea al cuello del pobre Luis.
Que lo disfrutéis, y os recuerdo que nos vemos el viernes 18 a las 7 para comentar “El valle de las sombras”, y entregaros vuestro flamante ejemplar de El chéf ha muerto con un 30% de descuento, merced al editor pirata Salem.

Vaya mierda. No era suficiente un investigador, tenían que ser dos, y con un sentido mermado, el tal Max podía captar esas cosas que los ojos no ven. Esto no era lo que le preocupaba, de esa parte ya se había ocupado, ja, ja, ja, y no por haber borrado las pistas, sino por haber dejado una, solo temía que diese con un forense torpe que no fuese capaz de encontrarla, todo es posible en esta ciudad de provincias. Le había visto actuando alguna vez: un robo de radio de coche, una cartera…., nimiedades, con esa pinta de modelo del pull and bear no parecía lo bastante espabilado para encontrar el pelo rojo hábilmente escondido.
Pobre Luis, todo se había precipitado por ese Plinio que llevaba dentro, quería aprovechar el juego de la cena navideña para llevar a cabo sus planes, haber tenido mas tiempo para manipular a los demás como si de marionetas se tratara, pero bien pensado, tampoco había salido mal, lástima del animal, pero habría sido dejar un testigo; ya normalmente le olfateaba de forma insistente, parecía ver más allá de su aspecto bonachón y dicharachero.
Ahora tocaba preparar el interrogatorio para esa Cris. Debería haber sospechado.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

una pregunta:
¿en la cena de navidad no morirá nadie,no? esque no me fio de los negritos.
Amparo has estado genial,te lo habían puesto muy difícil.

Anónimo dijo...

Me encanta como esta avanzando todo...Fantasbulosa aportación Amparo.
¡Que negritos más violentos estaís hechos!

Raquel(si, este es el unico blog en el que no puedo postear con mi cuenta google...)

cristina dijo...

Amparo, no sé qué pasó con mi comentario. Ahí va lo que más o menos escribí. Que lo estáis haciendo tan bien que no me atrevo a seguir y que a mì también me da miedo la cena esa del viernes 13.

cristina dijo...

Amparo, no sé qué pasó con mi comentario. Ahí va lo que más o menos escribí. Que lo estáis haciendo tan bien que no me atrevo a seguir y que a mì también me da miedo la cena esa del viernes 13.