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martes, 22 de diciembre de 2020

Estas navidades, te recomendamos algo más negro que el turrón de chocolate

 

¿Te gustó El encuentro con Ignacio del Valle? ¿Te quedaste con ganas de saber más sobre Arturo Andrade? Aquí te hablamos de sus otras aventuras, un más que recomendable regalo para estas fechas.

El arte de matar dragones (2003). El debut del personaje y del autor en la novela criminal histórica nos traslada al Madrid de 1939. En los albores de la posguerra conoceremos a un joven teniente del Servicio de inteligencia militar franquista llamado Andrade que vive atormentado por los recuerdos de su Badajoz natal, y que como si de un moderno rey Arturo se tratara, sigue obsesivamente el código de la orden de caballería. Hasta que recibe el encargo de las más altas esferas del régimen de encontrar El arte de matar dragones, una extraña tabla flamenca desaparecida del Museo del Prado durante la guerra. Y como todo caballero que se precie, para desfacer el entuerto nuestro héroe contará con la inestimable ayuda de su fiel escudero, un limpiabotas tullido llamado Vicente, tendrá que batirse con temibles enemigos como Román, un altivo y violento jefe de falange, y tratar de preservar la virtud de su amada Anna, una bella y etérea prostituta prusiana. Estas son algunas de las claves de una novela que resultó merecedora del Premio Felipe Trigo que, aparte de por el magnetismo de su protagonista y sus numerosos homenajes cervantinos, destaca por la riqueza de su lenguaje, que hace que prácticamente cada frase sea para enmarcar y cada capítulo un monumento literario, y por una interesante trama que coquetea con el espionaje, que servirá como pretexto para contarnos las desventuras por las que pasaron los fondos del Prado durante la contienda.

Los demonios de Berlín (2009) tiene lugar en Abril de 1945. En la cancillería alemana, sobre la inmensa maqueta de Germania, la megalomaníaca capital que el Führer había ideado para el Reich de los mil años, Andrade encuentra apuñalado a un físico, uno de los máximos responsables del programa atómico nazi, la última y ultrasecreta esperanza de Hitler para lograr una derrota honrosa. Así comienza una investigación contrarreloj para evitar filtraciones sobre la bomba mientras el ejército soviético cerca la ciudad, en que Andrade tendrá que jugarse doblemente el tipo como agente de las SS y del servicio secreto español para tratar de conseguir una plaza en un avión rumbo a Madrid para su amada Silke, una joven viuda berlinesa. Estamos ante la que sin duda es la entrega más trepidante de la serie, un vertiginoso thriller donde entre pesquisa y tiroteo, atraco al banco alemán y visita al búnker de Hitler, descubriremos no sólo el final sino también el origen del nazismo.

Soles negros (2016). En la más extrema y dura canícula extremeña aparece el cadáver de una niña que nadie conoce y nadie reclama. Solo Andrade, que tras regresar a España ha sido ascendido por sus méritos a capitán del Servicio de Inteligencia y descendido por sus recuerdos a los insondables infiernos del alcohol pero, ¿Cómo hacer justicia cuando trabajas al servicio de los culpables? Con la única ayuda de su inseparable Manolete, en su intento por descubrir la verdad tendrá que vérselas con la más innoble y caciquil aristocracia local, los santos menos inocentes de una sociedad aún más feudal que rural, una guerra de guerrillas donde los que más pierden son las familias de los maquis, todo ello mientras Un maestro manco que bebe para olvidar dice recordar el pasado republicano de Andrade. La cuarta y hasta el momento última novela de la serie , finalista del premio Hammett 2017, es la más social, costumbrista y coral , porque el asesino no es tan importante como denunciar los numerosos sicarios de un crimen tan deleznable como lucrativo, el tráfico de niños robados a los rojos.

¿Qué, a que todas las novelas pintan bien? Por eso, y porque seguramente no sepas con cuál quedarte, estas navidades te recomendamos algo más negro que el turrón de chocolate, leer la serie de Arturo Andrade.


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