Tras tomarnos un
respiro para recuperarnos del festival de este año, volvemos a las andadas, volvemos
a las propuestas de la tribu.
Y lo hacemos con la reseña
de la novela negra más bizarra e inclasificable que leí el año pasado. Una
reseña doblemente interesante, porque ha sido perpetrada por Elena Scarpetta, una
negrita que prefiere permanecer en el anonimato.
Así que, la intriga
está servida. ¿Cómo será la novela para que hasta yo diga que es tan rara? ¿Quién
será la negrita enmascarada?
Una pista: no se
llama Manolo.
La
japonesa calva, de Jesús Tiscar.
Por Elena
Scarpetta, la negrita enmascarada.
"La japonesa calva" es la obra
ganadora del Premio Ciudad de Getafe 2017. No es una novela policiaca con su
crimen y su detective, es una novela negra, muy negra llena de crítica social.
Un relato coral, amargo, duro y perturbador, que no deja indiferente.
La trama está ambientada en la periferia de una ciudad cualquiera
de España del 2016, con el gobierno en funciones. Una ciudad de 400.000 coches,
en un barrio degradado de clase baja del
extrarradio, donde las historias de más de una decena de personajes,
aparentemente independientes entre sí, giran en torno a Kazumi Kuriwako, una japonesa
rasurada (que no calva), masajista rara
y feucha, de pasado oscuro que se gana la vida dando masajes eróticos con final
feliz.
Un guardia civil, una
niñaca con un novio con "Daun", un anciana con artrosis, una
pelirroja explosiva engañada por su marido, un asesino novato que busca hacerse
famoso, una madre explotadora, un camello, un azafato del Decathlon... A medida que
transcurre la novela se hilvana la compleja red que conecta a los actores y que avanza y retrocede una y otra vez en la línea
temporal.
Los personajes son
desgraciados, retrato de las miserias actuales y reflejo de los sucesos del
noticiario. Les toca de cerca el abuso, la pobreza, la traición, el engaño y la
soledad, sobre todo la tremenda sensación de soledad que transmiten todos y que
quizás sea el nexo de unión de los
protagonistas.
Y es que, el crimen no deja de ser más que
otro elemento de ambientación, que transcurre en un segundo plano, casi
anecdótico.
El estilo de la prosa
de Tiscar es original y arriesgado, consigue que sea fluido, incluso con párrafos
largos. Impresiona por ser muy coloquial y, sin embargo, muestra estar muy
meditado hasta en las partes más machaconas y descoloca desde la primera página.
En resumen, una
zambullida en los arrabales a través de una novela corta y única.
5 comentarios:
interesante reseña, Scarpetta, por favor, jamás reveles tu identidad, me encanta el misterio y eso me anima a leer reseñas, de momento solo leía las de leer sin prisa y mira por donde surge Elena Escarpetta.
Veo que te quedaron ganas de japoneses , el club está lleno de raritos, encantadores todos eso sí. La leeré motivada porque dices que es corta y única
Me gusta mucho la reseña,Escarpetta,convences!!!
Si la leo es por ti y porque sé de japonesa solo tiene el título;-)
Interesante, Scarpetta. Haremos por leerla
Gracias por tu reseña.
Has conseguido interesarme por esta obra que no conocía y seguro que merecerá la pena. Gracias doctora Scarpetta.
Muy buena reseña. Ya me ha motivado para leerla. Gracias, enmascarada
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